Existen varias razones por las que accionistas pueden considerar la venta de su empresa. Puede ser por deseo de retirarse; para dar solución a un problema de sucesión; una estrategia de desinversión de un grupo industrial interesado en centrarse en su actividad principal… en cualquiera de los casos, y sea cual sea el motivo, existe una prioridad común: conseguir el mejor precio posible por la empresa que se vende. Aunque cada operación de venta es diferente, el proceso siempre requiere:
Contratación de asesores
Los vendedores admiten que la venta de su empresa se realizará una sola vez, y que la probabilidad de conseguir la mejor transacción posible aumenta con la contratación de asesores financieros, expertos en finanzas corporativas.
La función principal de cualquier asesor financiero es asumir la carga del proyecto gestionando la venta de manera que el vendedor pueda seguir centrándose en lo que mejor sabe hacer: dirigir su negocio y maximizar el beneficio. A la hora de elegir a los asesores, los vendedores deben considerar los siguientes aspectos:
Preparar la empresa para la venta
La preparación de la empresa para su venta por parte de sus vendedores puede aumentar de forma significativa tanto la probabilidad de venderla como el precio total. En este sentido, lo pasos a seguir serían:
Encontrar el comprador adecuado
Una clave para maximizar el valor del accionista es identificar a compradores a nivel mundial que puedan sacarle provecho a la adquisición de la empresa. Cuanto mayores sean los beneficios potenciales que puedan surgir de la transacción, mayor será el precio que un comprador esté dispuesto a pagar por la empresa.
Valoración
A la pregunta: ¿cuánto vale una empresa no cotizada?, existen muchas respuestas que varían en función de una serie de factores que influyen en la valoración de la misma, entre los que figuran:
En próximas entradas (II9 y (III) seguiremos con la descripción del proceso de venta.
Las ideas y conclusiones que figuran en este blog transmiten la interpretación que su autor/a hace sobre asuntos de actualidad y no reflejan necesariamente las opiniones de Livingstone Partners. Son de interés general y no serán interpretadas como consejos de inversión.
Share on: